Para que el sobrepeso, problema frecuente, no llegue a convertirse en obesidad hay que tratarlo a tiempo. Las dietas proteinadas consiguen bajar peso y grasa sin pasar hambre en períodos cortos de tiempo, ahora que, después de bajar peso, hay que reeducar los hábitos alimenticios para mantener los resultados obtenidos.

Dietas personalizadas
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Se estudian los hábitos dietéticos, el metabolismo basal y el cálculo del gasto energético. Se pesa y se miden los contornos del paciente para poder ver la evolución y respuesta del tratamiento. Se procede a diseñar una dieta individualizada acompañada, en ocasiones, de un tratamiento de apoyo con fármacos y/o tratamiento local.
Dietas proteinadas
- Este tratamiento consiste en eliminar el aporte de azúcares al organismo de forma radical, como nuestro cerebro necesita azúcar para funcionar y el cuerpo pone en marcha un proceso para transformar los depósitos grasos en azúcar. Es un proceso que para ser efectivo hay que darle unas 48 horas.
Test de intolerancia alimentaria y test Alcat
- Este tratamiento consiste en una extracción de sangre para estudiar las curvas de respuesta de los glóbulos blancos de la sangre. El fin es determinar los alimentos que no son bien tolerados por el organismo y que podrían ser responsables de problemas como: retención de líquidos, síntomas asmáticos, cefaleas, dificultado para perder peso, etc...